Terminas la prepa y llega el momento de elegir una carrera universitaria. ¿Lo malo? Con esa decisión llegan muchísimas dudas y miedos que no sabemos bien cómo afrontar. Hoy te contamos cuáles son los temores más frecuentes y porqué son casi un mito en México y el mundo.
¿A tí también te pasa que has esperado el momento de ingresar a la universidad por años pero ahora que sucede, el miedo se apodera de ti? Si respondiste que sí, entonces déjame decirte que nos ha pasado a muchos y algo más que normal en esta etapa de la vida.
Si bien el camino universitario es precioso y conlleva muchas buenas experiencias que te transformarán como persona y profesional, al momento de comenzarlo pueden surgir muchas dudas y con ellas miedos bastante coherentes.
Hoy te contaremos cuáles son los 4 miedos frecuentes que tiene todo estudiante ante el comienzo de la universidad y cómo puedes quitártelos de encima con información real.
Antes de comenzar a pensar en aquellos puntos que te dan miedo, tenemos que avisarte que no todo es como parece en la universidad. ¡Puede ser mucho mejor!
Estamos acostumbrados a pensar la etapa universitaria tal y como lo muestra el espectáculo, las películas y los medios de comunicación. Desde que nacemos consumimos ese tipo de historias en donde los estudiantes viven estudiando, encerrados en bibliotecas y alejándose de sus familiares. En otro extremo, nos muestran a estudiantes que están todo el día de parranda y ahí es cuando la cabeza se nos quema porque no entendemos como ambos mundos pueden combinarse.
Déjanos decirte que nada viene preestablecido en la universidad. Tu harás tu propio camino, manejarás tus propios horarios y tendrás la vida universitaria que tus prioridades te dejarán tener. Cada estudiante es único y sus preferencias y decisiones también lo son, por lo que no existe un patrón que debas seguir. La decisión es solo tuya.
Ahora si, dejemos de dar vueltas y vayamos a lo que nos importa: Esos miedos atroces que nos aparecen al momento de decidir ir a la universidad.
Es quizás el miedo más frecuente que tienen los estudiantes al comenzar una carrera universitaria. Al venir de la prepa, en donde ya conocíamos el ritmo de estudio, manejábamos las mismas asignaturas año tras año y reconocíamos las formas de evaluación de cada una de ellas, la incertidumbre del programa académico universitario es fatal.
¡Tranquilo! Lo primero que debes saber es que las asignaturas pueden ser difíciles pero no imposibles y podrás adaptarte a ellas como lo hiciste al comenzar la prepa. Además, las universidades suelen tener programas de adaptación en los ingresos, para que puedas conocer los reglamentos del programa, las formas de evaluación con las que te encontrarás y también ayudas pedagógicas que te acompañarán durante todo tu proceso universitario.
Las amistades del bachillerato son hermosas, pero aunque nos encantaría seguir todo el día juntos, es imposible ya que tienen gustos y preferencias distintas. Cuando cada cual toma su camino y te despides de esos compañeros que te acompañaron durante años, la tristeza y el temor de quedarnos solos puede ser muy grande.
Lo que no estamos viendo en esos momentos es que ingresamos a un entorno repleto de estudiantes en nuestra misma situación y como si eso fuera poco, con las mismas pasiones profesionales que las nuestras.
En la universidad no solo compartirás la vida de estudiante, las fiestas y las buenas compañías, sino que también podrás encontrar amigos que tengan la misma pasión vocacional que tú y ello podrá motivarte a investigar, estudiar y crecer más en tu campo profesional.
Los amigos que haces en la universidad, suelen ser los más duraderos de tu vida, porque los une mucho más que una institución, los une el recorrido académico y humano hacia un crecimiento profesional.
Creo que no mentimos si decimos que todos los estudiantes universitarios han tenido esta duda alguna vez. Ya sea cuando rindes mal un exámen o cuando te cuesta entender una asignatura. En variedad de momentos puedes sentir que te equivocaste al elegir la carrera y esto puede ser solo algo del momento o algo real.
Si la opción correcta es la segunda, déjame decirte que no pasa absolutamente nada.
Cambiar de carrera no es una pérdida de tiempo, al contrario, es ganarle al tiempo ya que descubres lo que realmente te apasiona antes de perder años estudiando algo que no es lo tuyo.
Si esto te sucede, solo deberás tomarte tu tiempo para pensar en lo que realmente te gusta e ir a por ello. Ningún ser humano está 100% seguro de sus decisiones, entonces no te presiones para estarlo tú. Elige lo que te haga feliz hasta donde te haga feliz.
Por último, vamos por el miedo a aislarte de tu vida tal y como la conocías. Ingresar a la universidad involucra un cambio enorme para ti. Dejas atrás una etapa más aniñada y comienzas a andar un camino con responsabilidades, sueños y crecimiento personal. En ese crecimiento, habrá cosas que ya no te gusten o llamen la atención y en su lugar llegarán cosas nuevas que te apasionarán.
Cambiar es parte de la vida y del crecimiento individual, no temas al cambio. En su lugar, intenta cuidar a las personas que quieres, organizarte para poder brindarles tiempo (aunque sea acotado), seguir disfrutando de lo que te hace feliz, realmente lo puedes lograr.
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Puedes lograr todo lo que sueñas, solo debes ir a por ello.